Sobre la media tarde del 13 de noviembre, el Pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha (CLM), aprobaba por unanimidad la Ley de Garantía de los Derechos de las Personas con Discapacidad de CLM. Un acto que tuvo un colofón emotivo al levantarse todos nuestros diputados y diputadas en la Cámara Regional y girándose, mirando hacia la tribuna de invitados e invitadas, se pusieron a aplaudir. Una Tribuna en la que había representantes del movimiento asociativo de todas las organizaciones del CERMI CLM, Personas con discapacidad y familiares, respondiendo en pie con otro aplauso al acto de reconocimiento de los diputados y diputadas en el Pleno.

 

Algo poco usual en estos días, la unanimidad, y que nuestros representantes aplaudan a quienes pudimos estar ese día en la Tribuna y viceversa. Un hecho que fue destacado por los medios de comunicación como algo poco común, y que pone de manifiesto que lo que debería ser más habitual, se convierta en algo extraordinario.

 

Pero el día después de todo esto y el día siguiente, y al otro, cuando pasaron los ecos de esos aplausos, y los titulares de prensa o de los crónicas de radio y TV,  nos queda el texto escrito de una norma que es mucho más que todo eso que sucedió el día  13 y siguientes.

 

Como es lógico en el proceso de elaboración de un texto como este, nuestro sector representado por el CERMI CLM, ha jugado un papel  importante, imprescindible y yo diría que esencial. Partiendo de la invitación de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales para poder desarrollar una gran norma de referencia sobre diferentes cuestiones que afectan en el día a día de las personas con discapacidad y sus familias, lo que empezamos a diseñar, hace casi dos año con el equipo de la Dirección General de Discapacidad  de CLM, fue un esbozo que pretendía iniciar la adaptación de los principios de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas a  la normativa de CLM – una Convención vestida de Manchega –. Teniendo además en cuenta la normativa estatal de referencia, consideramos a través del trabajo participativo, crítico y propositivo de los diferentes órganos de participación del CERMI CLM que esta Ley “no se nos podía escapar”, y que si algo deberíamos tener claro es que con la Ley se tendría que conseguir que en CLM se hablara de discapacidad en CLAVE DE DERECHOS HUMANOS; no solo en clave de subvenciones, convenios, recursos, programas o servicios, de noticias más o menos escabrosas, de curiosidades, de retos , de oportunidades, de amenazas o de fortalezas, de capacidad o incapacidad, … Algo que en estos últimas semanas se ha conseguido en parte.

 

Lo que sí tengo claro es que hablar mucho de un derecho no garantiza que el mismo se esté cumpliendo o se vaya a cumplir, aunque es importante hablar de ello para visualizar lo que queremos defender y reivindicar, muchas veces es preferible hablar menos y hacer más. Por eso lo que pretendíamos era que se aprobara una Ley que fuese a la esencia y a lo importante: LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD COMO SUJETOS DE DERECHOS Y LA GARANTÍA DE ESTOS DERECHOS CON LOS APOYOS PRECISOS  A LO LARGO DE SU VIDA.

 

Mucha gente nos pregunta, ¿pero esta Ley para qué sirve?, ¿qué va a cambiar?, ¿esto cambiará la vida de las personas con discapacidad de la noche a la mañana…? Evidentemente: NO. Ojalá. Ninguna Ley, por muy buena que esta sea, cambia de la noche a la mañana la vida de las Persona a las que afecta. Uno de los objetivos del CERMI CLM es estar vigilante al cumplimento de las leyes y en este caso con más motivo, de ahí que una vez entre en vigor tendremos que desplegar un trabajo importante en el ámbito propositivo para el desarrollo de la Ley y en el día a día de cada ámbito de actuación, siendo insistentes en nuestras reivindicaciones, en el cumplimiento de los Derechos recogidos en la norma y participando en el diseño, seguimiento y evaluación de la Estrategia sobre discapacidad.

 

Lo que creo que se ha conseguido también es  muy importante desde el punto de vista del cambio en  la forma de hacer las cosas en la administración regional, que los responsables de todas las consejerías piensen en clave de derechos de las personas con discapacidad, y sobre todo que nuestros asuntos de la discapacidad sean algo transversal, que afectan y competen a la acción de gobierno de todas las administraciones (autonómica, provincial, local,…). No solo del departamento de servicios sociales.

 

La Ley pretende avanzar en la generación de derechos sociales de las personas con discapacidad en CLM, y garantizar su efectividad y su cumplimiento, pero además establecer ¿qué pasa con quien no los garantice y no los cumpla o vulnere? De ahí la importancia del régimen de infracciones y sanciones contemplado en la Ley, y el sistema arbitral a desarrollar. Por ejemplo en esta Ley se avanza en el rechazo a la utilización de las personas con discapacidad en actividades de juego ilegal.

 

Otro de los pilares de este nuevo texto es garantizar los derechos a la participación política y social de las personas con discapacidad y sus organizaciones representativas en todos los ámbitos que nos afectan. Nuestra voz será oída en espacios de participación como el Consejo Escolar de CLM o el Consejo Regional de la Mujer, además de afianzar la participación del sector en la Comisión Gobierno – CERMI CLM.

 

Es bueno tener un informe de evaluación de impacto sobre discapacidad en todo lo que se legisle, pero hay que definir cómo, quién lo hará y para qué va a servir ese informe…

 

Es importante garantizar la sostenibilidad de las políticas de atención a las personas con discapacidad, y ejemplo de ello puede ser ese  1%  del PIB de CLM que desde el 2020 se tendrá que destinar a políticas de discapacidad, hecho relevante en un texto como este. Pero que debe llevar  parejo adaptaciones normativas favorables al sector, y  apoyos políticos, administrativos,  sociales y económicos. Como ejemplo de ello son artículos  tan importantes como el referido a la reserva del 6% en contratos de la Administración Regional de servicios, suministros o gestión de servicios públicos a Centros Especiales de Empleo, o  la introducción de cláusulas sociales que favorezcan la inclusión laboral de las personas con discapacidad en las empresas, la nueva figura  de los servicios de capacitación socio laboral,  entre otros.

 

Muchas de las reivindicaciones de nuestras organizaciones se han plasmado en esta nueva Ley, no ha sido fácil, la negociación ha sido larga, trabajada y sobre todo buscando acuerdos que beneficien al mayor número de personas con discapacidad, haciendo valer nuestra unidad como sector desde la diversidad… dialogando y buscando consensos, no siempre posibles, pues dialogar no significa que se esté de acuerdo siempre con tu interlocutor.

 

Esta Ley , próxima a publicarse en el Diario Oficial de CLM, no es sólo la culminación de muchos meses de trabajo, con una gran implicación de las organizaciones que componen el CERMI CLM y el asesoramiento del CERMI Estatal, sino también el principio de una labor de desarrollo normativo posterior, de poder diseñar entre todos y todas una Estrategia Regional sobre Discapacidad que plasme de forma práctica las medias de acción para poder garantizar los derechos recogidos en la misma y dote de una visón coordinada y transversal real a las políticas de acción para las personas con discapacidad y sus familias en CLM.